es.adopte.app

es.adopte.app

6 consejos de la Antigua Roma para superar hoy una ruptura

Hay cosas en la vida que no se olvidan: los veranos de tu infancia, el día que aprendiste a montar en bici, tu primer gran amor y, por supuesto, el día en que te rompieron el corazón.

Ojalá pudieras viajar en el tiempo, abrazarte y decirte que no estás sola, que cada día millones de personas pasan por lo mismo y que de todo se sale. Pero aunque el tiempo y la experiencia hayan hecho de ti una experta a la hora de dar consejos, la realidad es que cuando tienes que enfrentarte a una ruptura es todavía como si, parafraseando a la más grande, volvieras a estar en el punto de partida. ¡Y es totalmente normal!

La humanidad ha sido capaz de realizar trasplantes imposibles, volar a cualquier parte del mundo en cuestión de horas e incluso de viajar a la luna, pero si se trata de poner solución al mal de amores, aún estamos lejos de inventar una fórmula.

Hace más de 2.000 años, el poeta Ovidio ya se ocupó de escribir ciertos consejos de desamor en Remedia amoris (Remedios de amor), un libro de poesía latina para ayudar a sus coetáneos a poner tiritas en sus corazones rotos. Parezca mentira o no, muchos de estos consejos aún son vigentes y puedes aplicártelos a ti misma para superar una ruptura de forma sana y sin ponerte trampas a ti misma.

¡Que empiece este viaje en el tiempo!

1. Mantente ocupada

"¿Quieres ahuyentar al amor? El amor odia al trabajo; ocupa las horas y tu salud quedará asegurada. [...] Tú mismo puedes sembrar las plantas en el húmedo huerto y conducir allí las aguas tranquilas del arroyo. [...] Así que estos placeres embargan la atención, el amor pierde su violencia y huye con débiles alas."

Ovidio te diría que dedicaras el tiempo al campo o a la caza, pero quién dice plantar árboles y perseguir a pajaritos inocentes dice hoy en día hacer deporte, estudiar un curso nuevo, aprender una manualidad, centrarte en el trabajo... Permítete llorar y estar triste durante un tiempo, ¡pero no te pases! En cuanto los días más duros queden atrás, entrégate a cualquier actividad sana que te levante del sofá y te mantenga alejada de la tristeza. Esto impedirá que te fustigues y des más vueltas a la cabeza de las necesarias. Eso por no mencionar que conocerás a gente nueva, te divertirás y te sentirás mucho más estimulada.

2. Viaja

"Sobre todo huye, por fuertes que sean los vínculos que te encadenan, huye lejos y emprende viajes de larga duración. [...] Así que hayas partido, el campo, los compañeros de viaje y las sorpresas del camino proporcionarán mil solaces a tus cuitas."

Cambia de aires y descubre nuevos entornos siempre que sea posible. Visitar lugares que nunca antes habías pisado con tu ex te ayudará a vivir anécdotas y experiencias que ahora formarán parte de tu propio relato. Si te gusta viajar sola, elige un destino que te proporcione paz y que te ayude a conectar contigo misma. Si decides ir acompañada, rodéate de aquellas personas que empatizan con tu situación y que están dispuestas a llenarte de energía. ¡Queda mucho por vivir!

3. Rodéate de amigos y familia

"No tienes necesidad de aislarte; el aislamiento agravaría tus zozobras, que hallarán grande alivio en las reuniones numerosas. Si permaneces solo, te dominará la tristeza. [...] En tales casos la amistad es un bálsamo que cicatriza profundas llagas."

Desahógate, llora y déjate mimar por la gente que te quiere. Al fin y al cabo tú has hecho lo mismo por ellos cientos de veces; estáis para cuidaros los unos a los otros. No hay nada más sano y terapéutico que el abrazo sincero de una amiga que te escucha, te comprende y quiere lo mejor para ti. Tus colegas sabrán exactamente qué hacer para que te sientas apoyada y vuelvas a sonreír.

4. Evita el contacto con tu ex

"No acudas al pórtico en que ella suele distraerse, y evita tropezarla en las visitas que la educación te prescribe. ¿Qué sacarás de reanimar a su vista la llama casi apagada?"

Con el tiempo, es posible mantener cercanía y amistad con una persona a la que has amado, pero antes de llegar a este punto debes pasar por un proceso de sanación. La distancia y el silencio es clave para cerrar heridas, apaciguar los sentimientos y buscarles un nuevo lugar en tu corazón. Alejarse de forma temporal no significa dar la espalda ni abandonar, sino coger perspectiva para sanar y aprender a amar a esa persona de una forma distinta, si es que tu decisión es retomar el contacto en un tiempo.

En cualquier caso, estar pendiente de sus stories, de con quién va o qué deja de hacer solo va a producirte frustración. Si la tentación te puede, mejor será prevenir y bloquear su usuario. Céntrate en ti y da la bienvenida a la paz mental.

5. Cero reproches

"Tú, que pregonas los cien motivos que tuviste para romper definitivamente, [...] cesa las lamentaciones [...] y así llegarás a olvidar sin sentimiento. Cuando el resentimiento desaparece, el amor, libre de lazos, se aleja con prontitud."

Al terminar una relación, es clave mantener una conversación sincera y respetuosa donde las dos partes puedan dejar claros los sentimientos y malentendidos que los atormentan. Marchar en paz te permitirá cerrar antes y mejor tus heridas. Si esa persona no se portó bien contigo, alégrate de tenerla lejos y no te recrees en todo el mal que te hizo. No perdones si no quieres, pero avanza y progresa. Como diría Comando Tiburón, pasado pisado.

6. Si te cruzas con tu ex, muestra tu mejor versión

"[...] simula hallarte sano aunque te aflija la dolencia, y ríe estrepitosamente cuando tengas motivos para llorar. [...]  Lo que finjas bien hoy, mañana será una verdad."

No se trata de marcarte el papelón de tu vida, pero si te encuentras en una situación de la que no puedes escapar, siempre es preferible mantener una actitud serena que mostrarse a la defensiva. Los encontronazos no os harán bien a ninguno de los dos, mientras que intentar actuar con naturalidad te permitirá ordenar tus emociones y reaccionar con más soltura si la situación vuelve a repetirse.

Si te ha gustado este artículo, vas a flipar con:

Las amazonas: historias de unas guerreras más allá del mito

Hablemos de las musas

me inscribo
back to top